Ha pasado algún tiempo, exactamente quince años. En 1998 la Universidad de Barcelona organizó un curso de verano titularo "La jubilación de extranjeros en España".
¡Cómo pasa el tiempo! Entonces cuando se hablaba de extranjeros nos referíamos casi siempre a los del norte.
Del curso me acuerdo que entre los profesores existía el convencimiento de que llegarían cada vez más jubilados y que con el tiempo habría muchas residencias acogiendo a ancianos dependientes alemanes, suecos u holandeses, pagados en parte por la seguridad social de sus países que se beneficiarían de que aquí los precios de las residencias son más baratos y el clima más benigno.
Desde aquél curso he tenido la ocasión de participar en nueve viajes geroasistenciales (o sea, para conocer residencias en el extranjero), tanto organizados por la patronal catalana de residencias ACRA como por el portal de residencias para mayores, Inforesidencias.com. He ido a Suecia, Noruega, Dinamarca, Alemania, Holanda y Francia. He podido hablar con responsables políticos de diferentes ideologías así como profesionales y empresarios. Algunos hablaban de que sí acabarían viniendo muchos mayores dependientes. Pero lo que no he visto es que las residencias pensadas para mayores extranjeros se convierta en un subsector considerable dentro del geroasitencial.
la cuestión me ha vuelto a parecer interesante ahora por varios motivos.
Hace unas semanas me invitaron a asistir a una reunión en la que se proponía generar un clúster de empresas que tuviesen en común tener como clientes a personas mayores. Mientras les escuchaba pensé en que se podrían coordinar diferentes empresas para atraer al "anciano del norte". Lo dije durante la reunión pero me dio la sensación que lo del "clúster" (racimo en ingles) era algo mucho más complejo que lo que yo me imaginaba.
La cosa me duró unos días y, cuando ya lo había olvidado, leo que en Alemania están "exportando abuelos" a Polonia.
La cuestión es fácil. Las ayudas a la dependencia germanas dan para lo que dan. Quien necesita una residencia siempre tiene que pagar una parte importante, tan importante que a veces se hace inasumible. El resultado es que algunos mayores dependientes se van a Polonia; concretamente a una parte de Polonia donde se habla un dialecto alemán y dónde una residencia cuesta unos 1.200 Euros al mes.
Si alguien entra a ver la noticia verá que tiene comentarios y muchos son negativos. Yo, donde otros ven motivo de crítica veo oportunidad.
¿Qué haría falta para que miles de holandeses, alemanes o suecos mayores y dependientes viniesen a las residencias geriátricas españolas?
Se me ocurren varias cosas pero me gustaría mucho saber qué piensan quiénes leen este blog:
- Lo primero sería crear una red de residencias que estuviesen preparadas para atender a los residentes extranjeros a un precio tan competitivo que les hiciese cambiar de país. Después de ver lo que cuestan las residencias en diferentes países creo que un precio de unos 1.800€ al mes sería una cifra interesante. Si no podemos dar un servicio adecuado y atractivo por ese precio seguiremos como hasta ahora.
- Las residencias adecuadas deberían ser atractivas de forma que no viniese tener personal que hable el idioma de los residentes que acoge, debería adecuar su gastronomía a la del lugar de origen y debería parecerse a las residencias de origen. Esto requiere empezar estableciendo programas de formación o de estancia en los países de origen de auxiliares, enfermeras y otros profesionales con el riesgo de que, una vez se hayan formado, prefieran quedarse en el Norte.
- Sería bueno contar con un sistema de transporte que permitiese trasladar con precios competitivos a los mayores dependientes hacia aquí. Esto se podría hacer generando algún producto específico que permitiese coordinar una asistencia durante el vuelo, una recogida adaptada en el aeropuerto y traslado a las residencias.
- Por supuesto haría falta un sistema de información que ponga en contacto oferta y demanda. O sea, una Inforesidencias.com europea que ofreciese información multilingüe sobre residencias que estuviesen preparadas para atender a los residentes extranjeros.
- También se me ocurre que, si esto se plantease como algo estratégico para el sector o el país, sería necesario establecer un Lobby que intentase retirar barreras y convencer a las personas adecuadas para que facilitasen la llegada de los mayores y de algunos profesionales de origen. La función de ese lobby sería implicar a las administraciones en todos los niveles convenciéndolas de que esta llegada sería positiva para todos.
Si lo vemos desde la perspectiva "clúster" veo que harían falta varios perfiles de empresas que especializasen una parte o toda su actividad:
- Por supuesto las residencias: Si se plantease en serio la llegada de mayores dependientes se podrían resucitar algunos proyectos gerontológicos que languidecen porque se hicieron donde no había verdadera demanda. Si estos centros están relativamente cerca de un aeropuerto que tenga vuelos internacionales, podrían ser candidatos a triunfar.
- Empresas de formación para preparar a los profesionales que van a trabajar cuidando a los extranjeros. Estas empresas deberían orientarse hacia el fomento de "estancias temporales formativas en países de origen".
- Gestorías especializadas en tramitar la documentación adecuada para que los residentes extranjeros puedan gozar de los derechos a la salud y que la Seguridad Social española pueda recibir los pagos por los servicios prestados.
- Agencias de viajes (on line o físicas) que preparasen los traslados de los mayores y de los familiares que quisieran venir de visita. Podrían crearse servicios específicos como "expediciones adaptadas" en las que un grupo pudiera contar con acompañantes durante el trayecto "puerta a puerta".
- Portales de internet especializados
- Empresas de transporte adaptado.
Creo que me dejo cosas o digo algunas que no tienen mucho sentido. Después de todo es sólo una idea.
Sé que hasta ahora existen iniciativas para intercambiar residentes entre residencias europeas como Linkaged. Que en la Comunidad Valenciana se anunció una iniciativa en este sentido y que alguna empresa ha intentado por su cuenta atraer a estos mayores. Si hubiese alguien dispuesto a liderar el intento, ¿Sería realista pensar que en unos años tendremos un subsector de atención a personas mayores dependientes extranjeras?
No sabemos como salvar el sector...
ResponderEliminarTenemos suficiente población anciana en España para rebosar los geriátricos Españoles....
No me imagino lo costoso que seria formar al personal en lengua Germana y seguir cobrando lo mismo....
Hay que sobre pesar ,si seria rentable tener tantos mayores de otros países ,con nuestro sistema sanitario....no me convence el cluster para el europeo,prefiero que sea para español...